Esto es lo que soy

No lloro desde hace mucho tiempo.

Soy un desierto.

El infierno me ha deshidratado

y necesito

que alguien más llore por mí.

Mis alas están rotas

o quizá no fueron hechas para volar.

Vuelvo para volver a lo mismo de siempre.

He perdido la pieza más importante

de este puzle:

mi cerebro.

Prefiero estar ebrio.

Me gustaría empezar desde cero

en otro lugar,

pero ése sería el acto más cobarde

que habría hecho en mi vida.

Mientras tanto,

me quedo escuchando música

y calmando mis ganas de matarme.

Ya ni odio a las demás personas,

sólo a mí mismo.

Si quieres puedes venir conmigo

y descansar de ti misma

[en mis ruinas.

Absorberé tu dolor

y lo cambiaré

por lo que me queda de bienestar.

Tu voz es música para mis odios,

pero estoy olvidando

el valor de escuchar.

No te alejes de mí,

al menos no todavía,

que si te vas

tendré que ser internado de emergencia

y siempre le temí a los quirófanos.

No te asustes, espera.

Sólo estoy abriendo mi corazón

para que más adelante

no te tome por sorpresa.

Ponme una canción de Pink Floyd

y déjame descansar

sobre tu pecho.

Esto es lo que soy, cariño.

Siempre estoy triste,

[pero quédate.