No es lo mismo
¿Qué quieres que te diga? No es lo mismo, pero me calma.
La lluvia se ha presentado como una invitada de honor
y nos ha puesto en distintos lugares:
tú buscando lo que tanto deseas
y yo deseando lo que tanto perdí.
Ya te sufrí,
ya te imaginé,
ya te abracé en esas noches heladas,
ya te dejé ir,
ya te acepté.
No es lo mismo, pero me hace respirar mejor.
Te he escrito varias canciones
y quizás algún día las escuches
mientras recuerdas todo nuestro desastre
y sonríes por lo lejos que hemos llegado.
No te mentía cuando te decía
que eres una artista,
una maestra del engaño,
una experta del escapismo,
una diosa del ensayo y error,
una entrenadora del desamor.
Espero que no te falten las sonrisas
y que puedas dormir sin muchos problemas.
Siempre hay un clona que te calma,
una llamada, un cuerpo, un orgasmo,
un vino tinto para desahogarnos,
un cara bonita a la cual observar,
pero nunca dos mentes iguales a las cuales poseer.
No siento rencor hacia ti, eso sería injusto,
y a pesar de que no quieres saber nada de mí,
desde que te conozco te he estado cuidando,
aunque ya no eres la que conocí.
Es genuino lo que te digo. Somos dos bonitos errores.
Sigue lloviendo, supongo que necesito terminar este escrito
y despedirme hasta mañana,
hasta siempre,
hasta nunca.
Eres libre, no me hagas parte de tus emociones.
No es lo mismo, pero me distrae.
Comentarios
Publicar un comentario